Por su parte, el Liverpool ha disputado 9 finales de Champions League sin contar la de este año. Vestir de blanco es tener una misión, asumir el cometido de cambiar una historia frente a todos aquellos a los que únicamente les resta admitirla, padecerla, incluso con la crueldad que lo hizo este Atlético machadiano, partido a partido, golpe a golpe, verso a verso.
↑ El País. «La guerra del fútbol, vista para sentencia». ↑ «Esnáider sustituye a Escribá en el banquillo del Getafe». Empezamos muy fuerte con esta camiseta oversize oficial del grupo Nirvana. Llevar la camiseta de un equipo de fútbol se ha normalizado. ↑ «Quique Sánchez Flores, adiós al Getafe en menos de dos meses». ↑ Getafe y Numancia ascienden a Primera División.
El caso más llamativo dentro de los combinados nacionales sea quizás el de Uruguay, que lleva cuatro estrellas en su equipaje, cuando tan solo ha logrado dos (Mundial 30 y 50). El motivo no es otro que los celestes fueron los ganadores de la medalla de oro de los juegos olímpicos de 1924 y 1928, años donde no había todavía mundiales, por lo que la FIFA consideró que estos campeonatos olímpicos tenían la consideración de «mundiales».
Incluso ha llegado a tener encontronazos con jugadores de la NBA como Draymond Green por la pasión con la que suele vivir los partidos. En esa línea, la directiva destaca que los equipos generan fuentes inagotables de datos a través de las interacciones en redes sociales, la navegación en las tiendas online, la asistencia a los partidos y las búsquedas en internet. Sin embargo, existe una problemática a la que estos clubes se enfrentan desde hace años: son incapaces de aprovechar todo su potencial.
